Modelos lexicográficos digitales en la lexicografía didáctica es una monografía cuyo origen se sitúa en la sistematización de las palabras con fines didácticos dentro del mundo contemporáneo, un mundo íntimamente relacionado con diferentes formas y procesos de digitalización. Las primeras páginas de esta obra sirven, a través de su introducción, para situar al lector en el ámbito de estudio que se trata, haciendo un sucinto recorrido histórico por el arte de recopilar y organizar el vocabulario de cualquier comunidad de hablantes. A partir de ahí y a lo largo de ocho capítulos, distribuidos en tres bloques de contenidos claramente diferenciados, será posible avanzar por una lexicografía eminentemente pragmática ajustada a las necesidades del siglo XXI.
El primer bloque de contenidos lo conforman los tres capítulos iniciales del libro. El primero de ellos, La Lexicografía: ciencia y/o arte, recoge el debate abierto entre los investigadores sobre la consideración de esta disciplina, bien como ciencia, bien como arte. Tras la exposición de la argumentación esgrimida por quienes la consideran de una u otra forma, el autor estima que la lexicografía didáctica debe ser considerada desde dos perspectivas: una científica y otra teórica. Ello obedece a que tanto la metodología (detección de un problema, observación, propuesta de solución, experimentación, análisis, reflexión y formulación de afirmaciones que confirman o refutan la hipotética solución de partida) como los principios teóricos que sustentan el diseño de un diccionario para el aprendizaje de una lengua responden a una praxis científica. Además, su confección es el resultado de la aplicación sistemática de diferentes técnicas orientadas a la recopilación de información sobre las necesidades de los usuarios, los materiales lexicográficos, y su almacenamiento, gestión y explotación.
Por su parte, en El diccionario: estructuras lexicográficas —segundo capítulo— se realiza un estudio de las diferentes estructuras que comprende un diccionario en atención a datos codificados: acceso a los datos lexicográficos, hiperestructura, macroestructura, microestructura, medioestructura e iconoestructura.
El tercer y último capítulo de este primer bloque, La lexicografía electrónica: el soporte y los datos del diccionario, examina los conceptos “diccionario electrónico” y “diccionario digital” con el objetivo de analizar a continuación cuatro de los sistemas más utilizados para almacenar, gestionar y explotar datos lexicográficos, la mayor parte de las veces, en forma de diccionarios. Igualmente, pretende facilitar la gestión de los proyectos lexicográficos: el lenguaje de marcado extensible (XML), los Dictionary Writing Systems, las bases de datos y los repositorios de objetos digitales.
El segundo bloque temático de esta monografía sigue el modelo estructural del primero y también engloba tres capítulos. El primero, el cual lleva por título ¿Lexicografía pedagógica o lexicografía didáctica?, parte del análisis de los conceptos de pedagogía (ciencia) y didáctica (arte), observándose una clara relación entre ambos. A continuación, se realiza un estudio paralelo de otros dos conceptos: lexicografía pedagógica y lexicografía didáctica. En primero de ellos —lexicografía pedagógica— está orientado hacia el diseño, desarrollo y evaluación de un plan de formación para alcanzar unos objetivos generales de aprendizaje de lenguas, donde los diccionarios son herramientas fundamentales. El segundo concepto —lexicografía didáctica— se centra en el estudio de las necesidades lexicográficas de los usuarios de los diccionarios para el aprendizaje de lenguas, de los sistemas y formas de almacenamiento, gestión y explotación de los datos lexicográficos y de la evaluación de los modelos lexicográficos, además de la confección de diccionarios atendiendo a unos objetivos de aprendizaje específicos.
El segundo capítulo de este bloque central del libro, La lexicografía didáctica, tiene como eje fundamental la explicación del diccionario didáctico como diccionario social que satisface las necesidades de los aprendientes de lenguas, destacando la evolución de este tipo de obras (diccionarios), poniendo como ejemplo el caso de la lexicografía didáctica del español. En el capítulo se analizan los rasgos de esta rama de la lexicografía, así como los dos tipos de obras que comprende, es decir, los diccionarios escolares (aquellos confeccionados para satisfacer mediante su consulta las necesidades cognitivas y comunicativas de los hablantes nativos de una lengua durante su proceso de aprendizaje) y los diccionarios de aprendizaje (aquellos destinados a satisfacer las mismas necesidades en hablante no nativos de una lengua, principalmente, durante su proceso de aprendizaje). Por último, se introduce un nuevo modelo lexicográfico, el diccionario didáctico complementario, cuya explicación ocupa la tercera parte de esta monografía.
Esta segunda parte se cierra con un tercer capítulo que lleva por título La nivelación de los datos. En él se analiza la necesidad de confeccionar diccionarios que sean capaces de satisfacer necesidades cognitivas que vayan más allá de las detectadas en los niveles de aprendizaje de carácter estándar. Dichas necesidades son utilizadas como punto de partida para elaborar diccionarios que respondan a una clasificación de aprendiente inicial, medio o avanzado. Según el autor, la nivelación de datos debe permitir que la información proporcionada en cada uno de los rasgos que componen la microestructura del artículo lexicográfico sea diferente atendiendo al nivel de conocimiento de la lengua meta o de partida del usuario. Así, en el caso de los ejemplos de uso que aparecen en un diccionario bilingüe de latín-español para iniciarse en el estudio de la lengua latina, la nivelación de datos lexicográficos debe permitir que la consulta del diccionario devuelva datos de ejemplificación diferentes según quien consulte dicho diccionario: ejemplos oracionales en los que se marca la información sintáctica de los argumentos y satélites que conforman dicha oración, información relativa a los roles semánticos de los argumentos, ejemplos literarios modificados (adaptados) y ejemplos literarios sin modificar. Esta nivelación de datos lexicográficos constituye la fundamentación del modelo de diccionario propuesto en esta obra.
El tercer y último bloque temático de la monografía comprende dos capítulos a lo largo de los cuales se realiza el análisis del modelo lexicográfico propuesto. El primero de ellos, Los diccionarios didácticos complementarios de aprendizaje, ofrece una explicación pormenorizada sobre la forma y el fondo de este tipo de diccionario. Se argumenta la necesidad de que el modelo esté justificado desde una perspectiva teórica, tanto lexicográfica como lingüística, que sustente la base del desarrollo práctico del diccionario. Dado que el modelo admite diferentes planteamientos lexicográficos, se ofrece un abanico de posibilidades teóricas: desde la perspectiva de la teoría funcional de la lexicografía, pasando por la teoría de la forma del diccionario, o las teorías de Kromann, Riiber y Rosbach (1991) o Hausmann (1989), que enfocan sus estudios en la distinción entre diccionarios activos y pasivos y entre diccionarios de aprendizaje y de consulta, respectivamente. El autor defiende que la versatilidad y finalidad del modelo facilita la sinergia entre los principios de distintas teorías lexicográficas, lo que fortalece el diseño del diccionario y su posterior explotación. En lo que se refiere a los principios lingüísticos, se aboga por la teoría valencial de la gramática dependencial de Tesnière (1959) y por ayudar a entender el uso correcto de la complementación verbal, que suele ser uno de los problemas principales durante el proceso de aprendizaje de lenguas (Gao y Haitao 2020). A continuación, se definen las diferentes estructuras del modelo de diccionario complementario: partes iniciales, macroestructura, microestructura, medioestructura, iconoestructura y partes finales, proporcionando datos y ejemplos de su composición, utilidad y explotación; y ahondando en la bondad y beneficios de la nivelación de datos, ya antes explicada, que proporciona un modelo completamente inclusivo. Se incide, finalmente, en la necesidad de que el diccionario se vea complementado por una serie de actividades que permitan evaluar el grado de consecución de los objetivos del diccionario, potenciando la efectividad del mismo.
El último capítulo de la obra que nos ocupa, La calidad del diccionario complementario de aprendizaje como material educativo digital, versa sobre cómo evaluar la calidad del producto lexicográfico final confeccionado en base a un estándar, como es el caso de la Norma UNE 71362:2020. Cabe destacar que esta norma está diseñada para evaluar la calidad de los recursos educativos digitales. El autor propone una adaptación de los quince criterios que constituyen la norma a un diccionario complementario de aprendizaje, donde puntúan desde la perspectiva del docente y del discente, la especificación y adecuación de los objetivos de aprendizaje, la posibilidad de proporcionar distintos niveles de aprendizaje, la calidad formal o la reusabilidad e interoperabilidad de los datos lexicográficos, entre otros.
A la secuencia de los ocho capítulos que comprenden el grueso del contenido de la obra, le sigue una extensa bibliografía compuesta por más de ciento cincuenta trabajos, los cuales sirven para evidenciar y dejar constancia de lo ampliamente documentada que está la monografía, cuyo punto final lo pone el índice de la misma.
Sin lugar a dudas, a través de Modelos lexicográficos digitales en la lexicografía didáctica, Manuel Márquez se erige como un referente de la lexicografía reciente pues sabe conjugar en su aportación una visión actual de ese arte originario de compilación de vocabulario al que aludíamos al comienzo de este trabajo con las crecientes demandas de una sociedad cada vez más volcada en el aprendizaje efectivo de lenguas. Estas circunstancias no son fortuitas, sino que son fruto de las necesidades comunicativas impuestas por la globalización y por los nuevos modelos pedagógicos que abogan por un aprendizaje holístico de las lenguas. Los aprendientes de lenguas necesitan contar con recursos actualizados y efectivos que les sirvan de apoyo y les faciliten su paso por diferentes interlenguas hasta llegar al nivel de aprendizaje deseado. Por todo ello, la obra aquí esbozada, a través de un enfoque sencillo, directo y práctico, abre las puertas a un escenario que se aleja de la mera teorización y se acerca a la realidad del ciudadano de a pie.
Gao, Jun; Haitao, Liu. 2020. Valency Dictionaries and Chinese Vocabulary Acquisition for Foreign Learners. Lexikos 30: 1-32.
Hausmann, Franz Josef. 1989. Wörterbuchtipologie. En F. J. Hausmann, O. Reichmann, H. E. Wiegand y L. Zgusta, eds. Wörterbücher. Dictionaries. Dictionnaries. Ein internationales Handbuch zur Lexicograohie. An International Encyclopedia Lexicography. Enciclopédie Internationale de Lexicographie. Berlin y New York: Walter de Gruyter, pp. 968-981.
Kromann, Hans-Peder; Riiber, Theis; Rosbach, Poul. 1991. Principles of Bilingual Lexicography. En F. J. Hausmann, O. Reichmann, H. E. Wiegand y L. Zgusta, eds. Wörterbücher. Dictionaries. Dictionnaries. Ein internationales Handbuch zur Lexicograohie. An International Encyclopedia of Lexicography. Enciclopédie Internationale de Lexicographie. Berlin y New York: Walter de Gruyter, pp. 2711-2728.
Tesnière, Lucien. 1959. Éléments de Syntaxe Structurale. París: Klincksieck.